martes, 19 de noviembre de 2013

La vuelta al paraíso, se convirtió en un infierno.

No guardará la Selección muy buen recuerdo en esta gira africana. Si ante Guinea Ecuatorial, se sufrió para conseguir una victoria, que más que en el marcador, se consiguió en salir sin ningún lesionado, ante Sudáfrica se perdió y Víctor Valdés se retiró lesionado.
Las primeras pruebas que se le han realizado al portero español, apuntan a una rotura en el gemelo de la pierna derecha, Valdés salió en la segunda parte sustituyendo a Casillas, y en una salida a falta de 15 minutos para el final, se lesiono solo cuando volvía para su portería. La lesión parece importante y esperemos que las siguientes pruebas a las que tenga que ser sometido, no confirmen los malos augurios que hay en estos momentos.
El partido comenzó con la Copa del Mundo conquistada hace tres años, como protagonista. Hay muchos entrenadores a los que no les hace mucha gracia este tipo de parafernalias previas, el equipo se desconcentra por unos minutos y la tensión se evapora levemente, y eso pareció sucederle a España.
Sudáfrica mostró una intensidad y una concentración muy superior a la de España, quizás por tener enfrente a los Campeones del Mundo, quizás por estar en su casa, lo cierto es que los "Bafana-Bafana" hicieron una primera parte muy superior a la de España. Sudáfrica adelantó la defensa, obligó a Llorente a recibir muy lejos del área y ahí el jugador riojano pierde mucho potencial. El larguero primero, y Casillas después, impidieron que Sudáfrica se fuese al descanso con ventaja en el marcador.

En la segunda mitad Del Bosque movió el banquillo, Cazorla entró por Llorente, Villa dejó la banda al Santi Cazorla y pasó a ocupar el sitio de Llorente, pero el cambio tampoco funcionó, ni Cazorla entraba por banda ni Villa tenía ocasiones de gol.
Una gran combinación de Sudáfrica propició el gol de Parker, un gol que hacía justicia a lo que una selección y otra estaban ofreciendo sobre el césped. La entrada de Mata y de Navas, aportó al equipo la velocidad que hasta entonces no había tenido, pero ya era tarde, la Selección Sudafricana se encerró bien atrás y esperaba la contra para sentenciar el partido, tuvo varias ocasiones, y en una de ellas llegó la lesión de Valdés.
Para cerrar un día para el olvido, Arbeloa tuvo que ponerse la camiseta de portero, Del Bosque ya había realizado los 6 cambios previstos, pero en una mezcla de fair-play y de respeto al Campeón, Reina pudo terminar el partido de portero. Un partido en el que lo poco bueno, es la vuelta a un escenario que para siempre estará ligado a la historia de nuestro fútbol, la vuelta a un paraíso que en 90 minutos se convirtió en un infierno. 





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